Sucumbo
ante tu cielo rosado en calma
a tu lluvia de caracoles morados
a tu risa que vibra
en tu imperio de gracia
me rindo
ante tus encantos sutiles
atajos terrenales de tu pasión de lava
cedo
ante tus caminos lunares
a tu cauce de hierbabuena
a tu tacto de nubes frías
me sumerjo en tu mar de cabellos negros
caigo
desarmado
en el precipicio de tus senos
hacia tu ombligome vierto
-día y noche-
sobre el mundo abismal
de tus frases atadas
en tus plazas desiertas
y parques prohibidos.
Una respuesta a “Tots els dies i totes les nits”